Manejar, de alguna manera, es algo que involucra a otras personas. Uno no se encuentra en la pista sin que haya otro vehículo cerca; por el contrario, a diario se cruza con mil conductores que, como usted, quieren llegar de manera rápida a su destino, sin tener que lidiar con el tráfico ni con los otros inconvenientes que se presentan a diario.
Es por eso que la actitud que toma el propietario de un auto tiene mucho que ver con su desempeño ante el volante y muchas veces, puede incluso ocasionar accidentes. ¿Sabía que una de las principales causas de los choques o colisiones es la agresividad al conducir?
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Efectivamente, mientras más agresivo sea un conductor, más posibilidades tiene de provocar algún accidente. Pero, ¿qué lo hace agresivo?
Al conducir, la agresividad se manifiesta al realizar giros y frenadas bruscas, al no respetar la distancia recomendada entre autos o incluso realizar cambios de carril intempestivos. Aunque no lo crea, más que el no respetar las reglas de tránsito o sobrepasar el límite de velocidad establecido, ser un conductor agresivo podría costarle más caro de lo que piensa.
En estos casos, las recomendaciones son dos.
En primer lugar, evalúe cuál es su manera de conducir y comience a modificarla, a fin de no verse involucrado en este tipo de situaciones.
En segundo lugar, adquiera un seguro de auto (si desea comparar las alternativas para encontrar la más barata, revise esto ) que proteja su vehículo, ya que si bien puede que usted no provoque el accidente, sí podría verse afectado por otro conductor agresivo, y si este no cuenta con un seguro, tendrá que ver cómo arregla su vehículo.